Si paseo por Barcelona y tengo la oportunidad no dudo ni un solo momento pasar por el mercado La Boquería. A veces mi mujer me mira y me dice como a un niño pequeño "venga... vamos... a La Boquería a dar una vueltecita..." y ya sabe que me pongo contento. Me encanta pasear entre sus puestos o paradas y ver cómo disponen la fruta, que se mete por los ojos. O pasear por la parte del pescado y el marisco, aunque a veces asusten los precios. O por los bares que también ofrecen tapas elaboradas con productos frescos. A veces compramos algún zumo de frutas o buscamos algún producto para hacer alguna receta. Para mí es un placer pasear por este mercado, que cuenta con productos exóticos y al que cada día desde La Rambla acceden cientos de turistas paseando con sus cámaras. No sé qué tiene este lugar, pero no me canso nunca de pasear y disfrutar de La Boquería.
Pues a mi me encantan los mercados, es que es ver los puestos y me encanta pasear por sus calles, a un lado y al otro. La foto es divina, en un primer plano las sardinas saladas perfectamente colocadas como si se tratase de una rueda de carro.
ResponderEliminarJavier me gusta mucho tu blog, aquí seguiré viniendo cada vez que publiques, porque en una España que esta cambiando tanto en tan poco tiempo y bajo mi punto de vista retrocediendo varios enteros y volveremos a saborear los mercados de toda la vida. Si lo comparas friamente con un centro comercial pues te das cuenta que posee una mágia que el centro comercial no puede tener jamás, porque es sencillamente frío por mucha calefacción que tenga. Un beso.Amelia.
Aissxxx Esta es una de mis citas pendientes en Barcelona, esta y la de visitar el nou camp que se lo he prometido a mi padre un montón de veces!!! Como sabes tengo un blog de cocina desde hace ya un par de años, y la gente no para de hablar de este mercado, de ahí mi gran ilusión de conocerlo en persona!!! Un besazo Javier
ResponderEliminarHola Javier.
ResponderEliminarReconozco que cuesta mucho pasar por la Boqueria y no entrar, se ha de tener mucha fuerza de voluntad, sus paradas tan bien presentadas con variedad de productos por los tender@s son todo un espectaculo de olor y color. Las tarrinas de fruta y lso zumos son una delicia.
Un abrazo.
Soy fan incondicional de los mercados y es que en Barcelona tenemos un montón y todos espectaculares. Y el de Santa Caterina, que me dices?
ResponderEliminarMe encanta el ambientillo que hay en los mercados y alrededor. La comida es fiesta!
Un saludo Javier!
Pues nada Javier, pasea , pasea que es gratis y de paso haz fotos como la de los arenques tan agrupados u con tanto ritmo¡¡- Un abrazo
ResponderEliminarDebo reconocer que descubrí La Boquería hace sólo unos pocos años, (y eso que llevo toda la vida viviendo aquí!!!!) y estoy de acuerdo en que es un sitio fascinante. Bonita arengada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Además de la composición, balance... etc...etc....lo que más me gusta es que has escogido el blanco y negro para un lugar tan asociado con el colorido de sus paradas (también uno de mis favoritos en barna). Yo tampoco me canos de pasear por allí.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mis comentarios en las entradas posteriores se han evaporado, pero yo regreso e insisto ¡faltaría más!
ResponderEliminarCreo que tiene que ver con el nuevo sistema de verificación :(
Abrazo doble